La historia nos cuenta que el origen de la joyería es paralelo al de la especie humana, y que ésta era fabricada con fines mágicos y de protección como muletos. Era un bien preciado que, con el tiempo conquistó las artes del adorno gracias a los animos de seducción entre las personas. La joya de bisutería nace en los años veinte del siglo XX de la mano de Gabrielle Chanel dándole un reconocimiento como hermana pequeña de la joyería. Debido a su capacidad de adaptación a los caprichos de la moda y a su condición mutable la bisuteria se abrio a nuevas formas y colores con materiales como la resina, el cristal, la madera, el cuero, el acero y algunas piedras semipreciosas. Como ya mencionamos antes una joya de bisuteria puede resultar una perfecta imitación de una joya real y mientras su parecido sea mayor a una pieza real, la joya adquirirá un valor que puede llegar a ser desde los 120 a 5000 euros. Generalmente las joyas de bisuteria se caracterizan por estar inspiradas en temas como la naturaleza, las formas geométricas, algunas con espíritu futurista, y el aire oscuro de finales del siglo XIX.
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